El Día del Amigote

En la quinta de Pilar, el domingo 20 de Julio de 2008, se organizó un asado. Lo organizaron Fernando De Tomacco y el desaparecido Fernando Marín. Los invitados fueron José Chatruc, Adrían Bastía, Diego Menghi, Maxi Estévez, Miguel Micó, Eduardo Gilberto, Alberto Martín, Monty Burns, Enrique Gorostegui, Héctor García Cuerva, Fernando Hidalgo, Osama Bin Laden y “Cachito” Vigil (futuro DT de La Academia).

La entrada costaba 100 dólares, y cada uno debía llevar una bebida. La gente llegó a eso de las 11 AM. Sí, Estévez llegó temprano.

Empezaron con una picada: Maxi Estévez y Menghi jugaron una carrera, que ganó Menghi porque el auto de Estévez, si bien era un auto preparado para correr, inexplicablemente andaba lento, como si llevara a 13 personas obesas. Menghi atropelló a un hombre y a su familia, sin querer. Fernando Marín recogió los cuerpos, y los metió en su horno militar. De ahí el almuerzo.

Los hombres más grandes bebían sangre humana, cortesía de Monty y De Tomacco. Los más gordos, o sea Maxi Estévez solo, bebían el vino que trajeron los demás.

El plato principal era un hincha de Racing secuestrado una semana atrás. La idea fue de Gilberto. Hablo de la vivisección. “Esto se come con la mano” dijo Marín.

“Esto es lo que le faltaba a mi programa” Comentaba Alberto Martín.

Bin Laden estaba un poco decepcionado porque no era un americano terrorista al que se estaban comiendo, pero igual lo disfrutó.

Almorzaron y lo disfrutaron. Maxi Estévez quería más y como ya no había, decidió sacar su bolsita con narcóticos.

Chatruc, enojado porque no lo dejaron cocinar al hincha de Racing, prometió sumarse a las marchas contra el Gerenciamiento y el Órgano Fiduciario, y salir a ventilar ciertas “cosas”. Segundos después, todos, incluido el mismo Chatruc, estallaron de risa.

Al rato, el Chanchi, que ya estaba pasado de drogas, comenzó a contar chistes. García Cuerva comenzó a contar billetes. De Tomacco comenzó a contar almas en su jarrón con almas. Chatruc comenzó a contar los pelos de su cabeza (sólo le tomó siete segundos). Bastía comenzó a contar cuantos billetes sacó con su fábrica de humo este año. Monty Burns comenzó a contar entradas. Menghi nunca supo contar por eso no se sumó a esta actividad entre amigos. Micó comenzó a contar los puntos que sacó en Racing. Bin Laden empezó a contar aviones suicidas. Cachito Vigil empezó a contar los segundos que faltaban para volver a su casa color de rosa.

Tras un grandioso Día del Amigo, se volvieron a sus casas felices.

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