viernes, 25 de julio de 2008

Tamy la grossa presenta

Hola mis queridos seres inferiores. ¿Cómo les va la vida? acá todo bien, vean, en otro momento les cuento. Lo que me trae a mí, cabeza invisible de esta laureada institución es casi una anécdota, verán;Tamara, la chica que viene a limpiar los martes (antes venía martes y jueves, pero con esto del campo la situación se puso complicada) encontró en el buffet del club, debajo de la vitrina donde ponemos los pebetes y las empanadas (cuando hacíamos empanadas, antes del tema este del campo) un manuscrito que data de 1753 y viene firmado por un tal Lic. Darius Van Nostrum intitulado "Breve análisis sobre los hombres y el fútbol". Sí, el fútbol no existía y Van Nostrum no sólo era licenciado sino que además escribía sobre él. A ver que dice...

Éste es el Lic. Van Nostrum

Se tratará a continuación de clasificar el grado de pasión con la que los hombres (las mujeres no, como se entenderá más adelante por razones obvias) viven el amor que sienten desde su infancia por los colores de su club preferido.

Si bien es cierto que hay algunos individuos muy raros a los que no les importa nada y confiesan sin avergonzarse que les da lo mismo quien sale campeón o que club se va al descenso, como Jorge Lanata, pueden ser considerados gente rara, que busca destacarse, y por lo menos con toda seguridad forman parte de una minúscula minoría. Entremos entonces de lleno a la clasificación o mejor llamada gradación. La situación tomada como patrón para la evaluación de las conductas es la siguiente.

Pero antes una aclaración. El autor de la presente es “diferente” porque pertenece al selecto núcleo de los Racinguistas, cuyo club es metáfora de la Argentina, aunque no viene al caso explicar eso ahora. No obstante este análisis es válido para cualquier equipo de fútbol con cierta raigambre, historia y envergadura. Pueden excluirse quizás clubes como Atlas, o Comunicaciones subiendo un poco en la escala. El autor conoce un hincha de Comunicaciones, y usted también, pero no estamos autorizados a revelar quien es. Sólo daremos sus iniciales : N.C. De estos clubes conmovedoramente pequeños sólo se puede catalogar a su gente en los niveles intermedios, por razones que escapan al objeto de este estudio.

Ahora bien la situación patrón es la siguiente : La mujer acaba de tener un hijo/hija durante el sábado y al día siguiente es el domingo en que el club al que pertenece el flamante padre juega el clásico por excelencia. Puede ser que se defina la posibilidad de pelear el título o no. Eso no es relevante. Pero hay un clásico en el Clausura y otro en el Apertura y solo uno por torneo, en ese absurdo orden inverso a la lógica linguistica.

Un simpatizante puede llegar a olvidarse si el partido ya empezó o ya terminó. Ocupado como está con el cambio en su familia, quizás se entere porque al bajar a la entrada para acompañar algún familiar de visita escuche un grito de gol o vea la noticia en el televisor que está suspendido en el hall.

Y ésta es Tamy, una Grossa total.

Un hincha no va a olvidarse, pero conciente de su prioridad en el momento, aprovechará para preguntarle a cualquiera “Cómo va el partido” rápida y disimuladamente hasta cerciorarse del resultado final e irreversible.

Un fanatico no solo está conciente de la hora de inicio, sino que desde la previa tiene un auricular de la radio portátil en la oreja derecha y hasta media hora después de la pitada final se queda escuchando las sandeces que dicen los que tienen que opinar gansadas para llenar el espacio de la radio porque cobran por eso.

Por último un enfermo es retirado por su hermano, primo o mejor amigo y desaparece como mínimo por tres horas, dependiendo de la distancia entre el sanatorio y el estadio y de las condiciones del tránsito. Si se arma bardo puede llegar a ausentarse hasta 24 horas, porque él participó con seguridad.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

A Tammy la vi desnuda varias veces

Anónimo dijo...

No me sorprende, BORAT

Anónimo dijo...

Curioso artículo. Sobre todo por la foto de Galileo y las tetas photoshopeadas de Tammy.

Unknown dijo...

Sr.Diego. El contraste entre Galileo y la criatura de la fotografía reciente es un recurso más de los responsables del sitio. Ya se sabe que para ser de Racing deben ser necesariamente algo excéntricos. Bueno sería que los que aqui opinan nos dijeran tambien para las estadísticas si se consideran Fanáticos o Enfermos, ya que dificilmente les quepa una calificacion menor tan solo por haber ingesado aquí.