Y un día la rompió

Por Fabián Andrade

La llegada de José Domingo (¿Se llamará así por que el flaco vive de descanso?) Salcedo a Racing finalmente dio sus frutos. En Racing llegó a mediados de 2007 como un jugador sin futuro, malo, con cualidades de albañil y poco compromiso con el equipo y aun así decepcionó completamente. Cuando terminó el Apertura 2007 el fútbol chileno fue la tercera víctima que se cobró Mingo. Racing tuvo un respiro pero como llegó al club de Avellaneda a través de De Tomacco, cuando lo canjeó por un par de medias y unos auriculares en la Triple Frontera contrajo una deuda sin saberlo de 317.000 pesos. Claro, apenas a las semanas le dijeron que debía pagar ese dinero por Mingo, pero al verlo jugar Fernando dijo, y comparto, “Ese pelotudo no vale más que un par de medias, devolveme los auriculares chorro, ladrón de guante blanco, sos un sinvergüenza, te vamos a hacer marchas en Paraguay… a mí no me sacas plata por esta bolsa de carne vieja”.

Mingo jugó 15 partidos. Mejor dicho estuvo en la cancha 15 veces y anotó 0(cero) goles. Salcedo declaró que fue su mejor temporada a nivel goles. Goles en contra 0(cero).

Llegó el mes de Julio de 2008, siete meses después que Salcedo fuera a hundir a otro club y finalmente explotó. Se le declaró la quiebra a Blanquiceleste gracias a la llegada de Salcedo a Racing.

Yo les dije que este tipo nos iba a sorprender eh.