Posteando por un sueño:Hoy Diegazo.

Dada la evidente fuga de neuronas,inauguramos aquí el aporte rotativo de algunas plumas ignotas.Hoy es el turno de "Diegazo" alguien a quien nadie conoce demasiado,pero se mandó el cararrota y nos mandó ésta bonita página.

Para seguir con nuestros perfiles de “facheros de perfil bajo” (porque no todo es Kaka y Beckham), con ustedes hoy,Víctor “Carucha” Muller. Delantero, 35 (?) años, 90kg, 1,87m, lugar de nacimiento: entre la maleza, paradero actual: desconocido

¿Quien no guarda en su memoria los goles de Carucha en su momento de esplendor en Chacarita? Bueno, quizás no sean muchos, pero este delantero que actualmente pertenece al Santo (si, sin “s”), quedo en el inconciente colectivo del publico futbolero, no por sus goles y sus gambetas, sino por su ostentosa belleza. Todas las mujeres de la tribuna suspiraban cada vez que Carucha se acomodaba su bincha. Y pensar que ahora Gago se levanta a Silvina Luna. No me quiero imaginar si Carucha hubiese jugado en Boca…

Pero Carucha no es solo una cara bonita. Antes de alcanzar la fama como futbolista, Carucha ya era todo un dandy con el sexo opuesto. Así nos dijeron nuestros entrevistados, sus amigos de la infancia, que se identificaron como “los pibe de la esquina”. Cuenta la leyenda que Carucha era un pibe común, fachero, pero sin mucho éxito con las mujeres. Pero un día su vida tuvo un vuelco de 180º. Ante la atónita mirada de sus compañeros, Carucha se paseaba todos los días con una minita distinta, una mejor que la otra.

Hasta que en su cumpleaños numero 18, Carucha, ante la presión insostenible de sus compinches, tuvo que ceder, confesando su secreto: “Me vieron meando”. Parece que Dios había sido generoso con el pequeño Víctor, otorgándole no solo su hermosa cara, sino también un miembro de sorprendente diámetro. Pero sigamos adelante con esta biografía no autoriza de Muller.

Adelantemos unos años en la vida de Carucha. Luego de años de sacrificio en el potrero, y otros más en las inferiores de Chaca, Carucha logro su sueño de la infancia: triunfar en primera. Pero desgraciadamente esto no duro mucho, Chacarita descendió a la B nacional, y los injustos vientos del destino dejaron a Carucha en el olvido de esa jungla llamada la B.

Los últimos rumores indican que carucha todavía no entreno con el Santo, por complicaciones con el transfer de “Sportivo Barracas” que se quedo comiendo un chori con chimi en la esquina y no llego a la reunión para concretar el pase.

Juegue o no, Carucha fue, es y será un personaje ilustre en el fútbol argentino. El Adonis del ascenso.