lunes, 24 de diciembre de 2007

“El transfer no tardó en llegar, sino mi libertad condicional”

Por Chacho Álvarez

Esperando a Reinaldo Navia, en un bar de Palermo Hollywood, este notero se tomó una Seven Up. Al llegar el, lleno de tatuajes, y con un parche (SÍ) en el ojo, se sentó y saludó.

Chacho: Hola, Navia, arrancamos, ¿Dale?... ¿Cómo te llevas con tus compañeros?

Reinaldo Navia: Bien, supongo, bah, no tan bien, hay cierta tensión desde que desaparecieron herramientas de Pellerano, me culparon a mí, y desde ese día esta todo medio chingao, weones de mierda, dicen que lo robé yo.

CH: ¿Pero vos lo robaste?

RN: Sí, Claro.

CH: Ah (Piensa, cerebro, piensa)… ¿Por qué no jugaste mucho en Racing?

El "Choro" festejando un gol en un picadito en Olmos con su traje de reo.

RN: Bueno, porque llegué tarde, la justicia chilena no me dejaba salir de Santiago de Chile, por un causa, tu sabes, el transfer no fue lo que tardó en llegar, lo que tardó fue que me dieran la libertad condicional, y cuando me dejaron vine y tuve un problema con Costas, le robé el auto para venderlo en partes y bueno, por suerte se fue y ahora Micó me puso.

CH: Mucho robo, ¿Estuviste preso?

RN: Sí, claro… ocho años en una prisión de Chile, robo a mano armada, igual fui el dueño del pabellón.

CH: Uh, ¿Y con quien te llevas mejor de los del plantel?

RN: Y… a Erwin no le he robado nada, todavía, así que con el me llevo bien, y con Barijho me llevó bárbaro.

CH: Pero… juega en Huracán.

RN: Sí, pero somos amigos, por una salidera que hicimos hace unas semanas.

CH: ¿Crees que serás titular con Micó?

RN: No sé, espero que –

(Interrumpe)

CH: Disculpa que te interrumpa, pero… ¿No viste mi celular? Lo dejé por acá.

RN: No, no vi nada.

CH: Bueno, continuá.

RN: Creo que sí, espero que sí, porque ya no me queda guita, y voy a dejar las putas, y tengo a los weones de la yuta encima mío, y no puedo seguir choreando por un tiempo, pero ¿Quién te dice?

CH: Bueno, gracias Choro, un gusto.

RN: Es mío el gusto, adiós.

Al irse, le dije al mozo del bar que no encontraba mi celular, vimos las grabaciones de la cámara de seguridad y Navia, en un descuido mío, vimos como lo manoteaba y metía en su pantalón. Salí corriendo a buscarlo y vi que un patrullero estaba estacionado, y tres policías ponían bajo arresto al Choro, que estaba acostado en el suelo, con las manos en la nuca, por tratar de robarse un auto a punta de pistola.

Recuperé mi celular xd.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Todo lo que tengo para decir es que la Seven Up es la gaseosa mas gay de todas las gaseosas.